Marco, ya me conoces. Soy una mujer de carácter más parecida a tu madre que a la idiota de tu ex.
Soy tan fiel como cabezota. Soy una falsa sumisa.
Llevo meses haciendo dieta para entrar en el vestido de novia que TU elegiste y en la talla que TU decidiste. Es mi regalo para ti.
He dejado de comerme las uñas para lucir el anillo de brillantes de tu abuela. Es tu regalo para mi.
Y ahora, después de verte entrar en el hotel Majestic de la mano de MI modista, doy por suspendida la boda mientras me como un pastel de chocolate con corazón de brillantes.